Buenas noches!!
La entrada de esta semana se basa en una sesión práctica realizada por mi grupo, en el que yo me incluyo, por ello cambiaré la plantilla y me basaré simplemente en explicar la clase.

En primer lugar, hemos tenido que trabajar el esquema corporal a través del tema del delfín y hemos optado por el cuento motor para llevarlo a cabo, por ello hemos elegido el delfín rosa que vive en el amazonas y está en peligro de extinción. Esto nos daba pie a trabajar también la contaminación marina y el reciclaje.
Los alumnos al trasladarse del aula al pabellón tenían que cantar la siguiente canción:
Bajo del mar, bajo del mar
(moviendo el brazo simulando las olas del mar)
Vive un delfín, muy chiquitín, siendo feliz
(juntando los brazos al cuerpo, agachándose un poquito y sonriendo)
Si tú lo quieres ayudar, no eches basura en el mar
(señalando con el dedo índice hacía delante, y moviendo el dedo índice hacía los lados)
Mientras nosotros, siempre ayudamos, bajo del mar
(nos señalamos a nosotros mismos y movemos el brazo simulando las olas del mar)

En la primera actividad,
Las medusas venenosas, los niños tenían que atravesar unas picas esquivándolas, agachándose y saltándolas puesto que éstas eran medusas y estaban caracterizadas como tal. La sesión continuó con la actividad de
El pez payaso, en la cual la profesora se ponía una diadema con dos peces y comenzaba a realizar distintos movimientos que los alumnos debían imitar, como variante decidimos que la diadema podía colocarse a algún alumno para repetir el proceso. Esta actividad concluyó con una canción;
Serafín y su amiguito el pez payaso
van nadando bajo del mar buscando comida
pero tienen un problema, no saben continuar
pero ellos siguen cantando bajo del mar.
Para acabar la actividad motriz llevamos a cabo una actividad, llamada Limpiemos el mar, en la que los niños tenían que limpiar el mar que estaba lleno de plásticos, para ello debían salir de uno en uno y colocar el residuo en la parte del cuerpo que la profesora eligiera, como variante los alumnos, posteriormente, tuvieron que salir en parejas y transportar el objeto hasta el contenedor amarillo entre los dos.
Finalmente, la sesión acabó con la relajación, donde los alumnos tenían que imaginarse que estaban en el mar, con la música de éste de fondo, y acariciar la espalda del compañero simulando que eran cangrejos, algas, viento, entre otros fenómenos los que realizaban esta acción.
A modo de conclusión, tras realizar la práctica puedo decir que, es una sesión muy atractiva y motivadora para los niños puesto que la caracterización, tanto en las actividades como a los alumnos propios, es muy entusiasmante. Como aspectos a mejorar he de decir que el momento de actividad motriz se ha hecho demasiado corto por ello podríamos aumentar los obstáculos en la actividad uno, hacer varias variantes en la dos y poner más residuos en la tres. Otro aspecto a mejorar ha sido la canción de la actividad dos, que tras realizarla con las compañeras nos hemos dado cuenta que sería muy complicada para niños de infantil, por ello deberíamos acortarla y repetir estrofas. Por último, otro aspecto a mejorar sería repartir a los participantes en cuatro filas para acortar así el tiempo de espera.
En definitiva, he salido con muy buen sabor de boca de esta clase, no solo por el trabajo realizado por mi y por mis compañeras, sino también por el comportamiento y entusiasmo de todos los participantes.